LEONES PARA LA FUERZA AÉREA
La caída del contrato para la adquisición de los Mirage F-1M del Ejército del Aire Español para la Fuerza Aérea Argentina fue rápidamente seguida de la confirmación de compra de Kfirs provenientes de Israel. Mucho se ha dicho sobre que versión de la aeronave será entregada a la Argentina, siendo las principales hipótesis el ya clásico C10 o el nuevo Block 60 que promete considerables mejoras frente a su predecesor. Por: Andrei Serbin Pont.
Por: Andrei Serbin Pont*.
El contrato de los Kfir estipula la transferencia de 18 aeronaves, de las cuales las primeras 6 serían entregadas en el transcurso del año, y las otras 12 unidades serian ensambladas por FADEA en Argentina con cooperación de Israel para facilitar la transferencia de tecnología. La transacción rondaría un valor aproximado de 500 millones de dólares.
Muchos se hacen ilusiones en cuanto al salto tecnológico que el Kfir representa para la FAA. ¿Pero es realmente la mejor opción? Colombia se ha mostrado insatisfecha con la reciente incorporación de KfirC10 (en un caso muy particular donde parte de la flota de la versión C12 que no dispone de del radar ELTA EL/M 2032), haciéndose mención de la incorporación de equipos provenientes de stocks viejos, así como limitaciones en las capacidades de combate aire-aire de dicha plataforma. Este último punto se hizo evidente en el reciente incidente de los bombarderos Rusos que sobrevolaron territorio Colombiano, siendo que en su primera pasada la tardía detección de las aeronaves por parte de los radares cumpliendo funciones de alerta temprana, significaron que los Kfir no llegaron a despegar a tiempo para localizar e iluminar a los bombarderos con sus propios radares. Siendo que Argentina dispone de un espacio aéreo mucha más grande que el de Colombia, y una cobertura de radares precaria y con fuertes falencias, poco indica que el caso Argentino sería diferente. Cabe decir que sería, incluso, peor.
El problema Argentino no radica exclusivamente en la obsolescencia de sus medios de combate aéreo, cuyas principales aeronaves de intercepción son los viejos Mirage, dignos de la Guerra de los Seis Días de 1967. Sino que Argentina hoy por hoy no dispone de suficientes radares militares para cubrir el espacio aéreo, ni de medios avanzados de detección operados desde plataformas aéreas, ni dispone de una doctrina de combate para aviones dotados de equipamientos y armamento avanzado como de los que dispone el Kfir. El Kfir promete un primer paso en la dirección correcta, siendo que ofrecerá un avión caza con capacidades actualizadas, sistemas electrónicos avanzados, radar moderno y armamento de última generación, pero sin equipamientos complementarios y el desarrollo de un doctrina correspondiente, poco se podrá hacer.
La primera prioridad debe ser la radarización del país, pero no solo que los radares tengan una cobertura total del territorio nacional, sino que operen las 24 horas del día, y que sean en buena parte radares 3D militares, permitiendo dar con la ubicación exacta de la aeronave detectada. La segunda prioridad es la disponibilidad de plataformas aéreas de alerta temprana, que complementen las tareas de los radares en tierra, y permitan la coordinación de operaciones aéreas en combinación con los Kfir, Pampa y A-4AR. La tercera prioridad va a ser la ampliación de la flota de cazas multirol, siendo que la actual incorporación de Kfirs sería suficiente para dotar de unidades a solo un Grupo de Caza, insuficiente para cubrir la totalidad del territorio nacional, lo que obligara la FAA a realizar despliegues sobre teatros de operaciones específicos al no disponer de los medios suficientes para realizar operaciones simultaneas en múltiples puntos del territorio nacional.
Por último, es clave recordar que a pesar de estar dotado de modernos sistemas electrónicos y armamento, en esencia sigue siendo un avión de 3ra generación muy modernizado. El Kfir nació como un pariente cercano de los Mirage que la FAA sigue operando, solo que equipados con una planta motriz norteamericana, y a través del tiempo han sido renovados para mantener las condiciones operativas de sus células y poder incorporar nuevos sistemas y armamentos. El C10 ofrece el ELTA EL/M 2032, y en el caso del Block 60 se ofrece el moderno ELTA EL/M 2052, un avanzado radar AESA de características similares a los que operan algunos de los cazas modernos en producción hoy en día. Las medidas electrónicas están compuestas por una serie de sistema desarrollados por el Elbit que le otorgan al Kfir una excelente capacidad de guerra electrónica. En cuanto a armamento, Israel dispone de una amplia panoplia de vectores homologados para el Kfir, destacándose los misiles Python V y Derby, Delilah, Popeye y una variedad de bombas guidas y no guiadas.
En resumidas cuentas, el Kfir podría otorgar a la FAA capacidades que ha deseados durante mucho tiempo, así como una oportunidad de sustituir sistemas de armas antiguos como el Mirage. Pero hay que ser cautelosos, el Kfir no presenta una solución a los problemas que plagan a la FAA, sino un posible paso en la dirección correcta, así como un alivio ante la compra no concretada de los Mirage F1M.
fuente: www.sur1810.com
1 comentario:
celula de 1955 mas un motor turbojet de 1952 con record de flame outs,eso es el kfir,como si a un peugeot de los 70 le pones un turbocargador,eso seria el radar moderno,y quieres ,... correr en WRC,con autos modernos,estas loco,pobreArgentina ,Ecuador,pais bananero ya dio de baja al kfir,por cariiiisimo de mantener,obsoleto y peligroso.
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